Me parece increíble que hayamos esperado hasta marzo para lanzar la primera receta del 2015... Pero es comprensible: en estos tiempos es todo un corre que te pillo, no tenemos tiempo para nada! Sin embargo, de vez en cuando tendríamos que tomarnos un respiro y dedicarle un rato a alguna de esas cosas en las que normalmente no perderíamos el tiempo... Por ejemplo... hacer nosotr@s mism@s un poquito de hojaldre casero para tus recetas! No es para nada tan complicado como al principio se piensa. Claro, es mas fácil si tenemos una amasadora, pero sin ella también es posible y fácil.
Necesitaremos:
500 gr de harina
500 gr de mantequilla ( mejor, 400 gr margarina y 100 mantequilla, pero lee el *)
15 gr de sal
Aproximadamente 150 ml de agua
* Mantequilla o margarina: sería mejor usar al menos 3/4 de margarina porque la mantequilla le da un sabor muy intenso que no queda bien con todas las preparaciones. Pero es muy importante que no sea margarina de la de untar sino esa en bloques, que se mantiene mas dura después de trabajarla.
Preparación:
Empezaremos con la mantequilla/margarina. Tenemos que amasarla junto a 1/3 de la harina (unos 150 gr está bien). Haremos que la mantequilla fría sea mas manejable cortándola en trozos que pondremos sobre la mesa y aplastaremos con un puñetazo (si si). A continuación amasamos hasta crear una masa homogenea. Si tenemos amasadora usaremos el gancho. Si no, usaremos las manos y seremos muy rápidos para no calentar la masa. Dispondremos esta pasta formando una especie de ladrillo sobre uno de los papeles de la mantequilla, por ejemplo, o cualquier superficie limpia y pasaremos la otra parte de la masa.
La otra parte consiste en disolver la sal en unos 50 ml de agua, con la que empezaremos a amasar la restante harina, añadiendo poco a poco el resto del agua, solo la necesaria para conseguir una masa poco pegajosa pero blanda cuanto la otra masa. Dejamos reposar un rato, unos 10 minutos.
Enharinando la superficie de trabajo cuando sea necesario, con ayuda de un rodillo, extenderemos la segunda masa obteniendo un cuadrado suficientemente grande como para envolver la masa de mantequilla como si fuera una tableta de chocolate (mirad la foto)
Delicadamente, golpearemos la masa suavemente con el rodillo, manteniéndolo parelaleo a la superficie, primero paralelamente al borde de la mesa, luego perpendicularmente la borde de la mesa. Esto servirá a adherir las 2 masas uniformemente. Ahora podremos extenderla creando un rectángulo del doble de largo que de ancho, de medio centímetro de grosor.
Doblaremos a continuación el rectángulo como veis en la foto, en 4 (llevando las extremidades al centro y luego cerrándolo como un libro). Ahora giraremos la masa colocando el lado abierto en frente, en el lado mas lejano a nosotros, y volveremos a extender y doblar. Extenderemos y doblaremos por un total de 4 veces (4x4), dejando si es posible que la masa repose unos 20 minutos en el frigorífico entre doblez y doblez.
Por último, envolveremos el bloque obtenido con película de cocina y lo dejaremos un día (o al menos 8 horas) en el frigorífico antes de lanzarnos con nuestras recetas preferidas. Recordad que tendremos que extender el hojaldre sin volverlo a amasar porque se perderían todas las hojas que tanto trabajo nos ha costado doblar. Sin embargo os puedo sugerir algunas recetas para reutilizar los retales que os sobren.
Poco a poco os iré proponiendo algunas recetas a base de hojaldre que os harán sentir orgullosos de lo que se puede hacer con un poco de tiempo. Os aseguro que, si os dais el capricho de un poco de tiempo en la cocina, extender y doblar puede ser muy relajante!
Diana Manzanares Ruiz